Raymundo Rivera va por un Loma Bonita más justo
:: «Si se pudo» dijo a los asistentes al término de su toma de protesta.
Loma Bonita, Oax.- Quienes me conocen y son muchos, saben del profundo amor que le tengo a Loma Bonita y a su gente, comentó Raymundo Rivera Hernández presidente municipal de esta ciudad en el arranque de su mensaje a los asistentes a su toma de protesta.
El edil se pronunció por un municipio más justo y equitativo, donde habrá un combate frontal contra los males que afectan a los lomabonitenses.
«Mi gobierno tiene una meta, que Loma Bonita logre mejorar de las difíciles condiciones sociales que padecemos pues en este gobierno el ataque será frontal contra la pobreza, la marginación y la desigualdad, buscando un mejor lugar para vivir», resaltó Rivera Hernández.
Dijo que su llegada se debe a un cambio político que la población había pedido a gritos en su búsqueda por un mejor gobierno donde sus voces fueran escuchadas y sus necesidades atendidas.
Sostuvo que durante mucho tiempo vio cómo el pueblo donde nació aumentaba la pobreza y la marginación y, solo unos cuantos eran los beneficiados ante estas acciones, por ello decidió emprender un movimiento que escuchara a todos los ciudadanos, donde la participación no sea de unos cuantos sino de todos. Donde los beneficios de la política fueran visibles y no simples discursos.
«El pasado 1 de julio hicimos historia, al ganar unas elecciones, en donde sus exigencias nos han dado la oportunidad para exigir condiciones de vida más justas para nuestro pueblo y nuestra gente», destacó el edil.
Así mismo recalcó que tiene un gran compromiso con Loma Bonita de hacer de ella una tierra, más justa, más libre y más igual, pues los ciudadanos no pueden seguir sufriendo ante la pobreza y marginación. «No habré de descansar hasta no ver mejores condiciones de vida para los lomabonitenses» exclamó.
Por último externó a los presentes:
«Quiero decirles que sí se pudo, a pesar de todos los pesares, sí se pudo, a pesar de los topes, sí se pudo y aquí estamos, de todo corazón aquí estamos concluyó Don Ray.
