sábado, julio 6, 2024
Internacional

Con base en la experiencia boliviana México cometería “grave error” si permite que su poder judicial sea elegido popularmente.


CDMX, tres de julio de 2024.- Con base en la experiencia de Bolivia, país en el que el voto popular
busca definir finalmente los cargos más relevantes de su Poder Judicial y el cual fue calificado
como “un rotundo fracaso”, México no debería llevar a cabo una reforma que permita que el voto
popular en definitiva sea el que elija a sus ministros o jueces a nivel federal.
Juan Pablo Cervantes Zambrano, presidente del ilustre Colegio de Abogados de Chuquisaca, en
Bolivia, afirmó que los bolivianos han confirmado que el pueblo no es el más sabio para poder
tomar determinaciones sobre cargos en los que deberían estar los expertos más capacitados
técnicamente y no las más carismáticos o los que reciben órdenes políticas.
Si México desea tener una administración proba con personas integras y bien capacidad en su
sistema judicial, eso definitivamente no lo va a conseguir con una “elección popular”, aseguró el
especialista sudamericano en el marco del conversatorio titulado “Juzgadores a la Urnas, Fracaso
y Retroceso, el caso Bolivia” organizado por México Justo.
Los ministros y jueces deberían de estar sometidos al cumplimiento de la Constitución y las leyes
de cada país y no al poder político, ya que ello termina por provocar con el tiempo más corrupción
y retrocesos como en el caso de Bolivia en 14 años de utilizar este modelo por mandado del
partido político Movimiento al Socialismo.
El abogado hizo un recuento de cómo un partido y un dirigente político como Evo Morales, quien
pretendió quedarse indefinidamente en el poder en Bolivia, lograron controlar a la gran mayoría
de las instituciones sociales y de justicia en aquel país para que trabajen en función de sus
intereses.
Hoy en día, añadió el especialista, Bolivia enfrenta una severa crisis económica, de
institucionalidad, con instancias totalmente resquebrajadas, así como judicial, que podría provocar
incluso que los ministros de la Corte en dicha nación pudieran quedarse indefinidamente en sus
cargos.
El llamado voto popular para elegir puestos que deben ser técnicos y no políticos, así como de
confianza, honestidad y probidad, han propiciado una justicia sometida que no es ni
independiente ni imparcial en Bolivia, aseguró.

Cervantes Zambrano sugirió por ello la posibilidad de procesos de preselección de estas
autoridades, al margen de lo político, hechos por instancias independientes, para que los
candidatos sean sugeridos al congreso para su discusión y elección.
Esta crisis judicial en Bolivia, añadió, ha propiciado el deterioro institucional de las barras y los
colegios de abogados, así como de la instrucción y las capacidades de los abogados, lo que es una
muestra más del fracaso de este modelo judicial implantado en Bolivia hace 14 años, que dio paso
a una justicia al mandato del expresidente Evo Morales, quien aún decide en muchos ámbitos de
la vida pública de esa nación.
El presidente del Colegio de Abogados de Chuquisaca, hizo votos porque México pueda resolver de
la mejor manera la reforma judicial propuesta sin caer en la intención de que ésta sea sometida al
poder político y logre integrar el parecer de la sociedad sin dejar de priorizar el conocimiento, la
honestidad y la independencia de quienes conformarán los más altas cargos de su poder Judicial.
Al principio del conversatorio, Juan Carlos Pérez Góngora, presidente de México Justo, hizo un
recuento de la reforma judicial propuesta por el ejecutivo en México y destacó la intención de la
Presidencia de que dicha reforma quede aprobada lo antes posible y bajo todos los términos en
los que ha sido enviada.
La bienvenida al conversatorio, mismo que fue conducido por Carlos Macedonio Hernández,
abogado y profesor investigador de la Universidad de Yucatán, fue hecha por el presidente del
Consejo Académico de México Justo, el ministro en retiro Genaro Góngora Pimentel.