Yrma Lydya ya había denunciado por violencia a Jesús “N” antes de que la asesinara en el Suntory
La cantante acusó a su esposo de golpearla, tratar de ahogarla en un jacuzzi, tortularla con toques eléctricos, ponerle una pistola en la cabeza y decirle “te quiero matar”.
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Seis meses antes de ser asesinada, la cantante Yrma Lydya denunció penalmente a su esposo, el abogado Jesús “N”, por violencia familiar al acusarlo de golpearla, tratar de ahogarla en un jacuzzi, tortularla con toques eléctricos, ponerle una pistola en la cabeza y decirle “te quiero matar”.
Así quedó impreso el testimonio de la mujer, de 21 años, en la denuncia que hizo ante el Ministerio Público de la alcaldía Álvaro Obregón, de acuerdo con un reporte del periodista Antonio Nieto en el noticiero “Despierta” de Televisa. Sin embargo, poco después, por razones que aún se desconocen, la víctima retiró la demanda y otorgó el perdón a su agresor.
Y pese al riesgo feminicida que alertó la víctima y al repetido discurso de la fiscal general de Justicia local, Ernestina Godoy, de velar por la seguridad de las mujeres que denuncian violencia de género y de que “no habrá impunidad”, el Ministerio Público no dio el debido seguimiento al caso ni reclasificó el delito a tentativa de feminicidio. De haberlo hecho, el caso se tendría que haber investigado de oficio.
Por el contrario, el Ministerio Público omitió hacer diligencias y citar a declarar a Jesús “N” y después archivó la carpeta de investigación. Consultada por el periodista, la FGJCDMX solo dijo que “inició una investigación interna para esclarecer si hubo omisiones”.
El testimonio de la violencia
Según el mencionado reporte periodístico, la denuncia que Yrma Lydia hizo contra su esposo Jesús “N” tuvo como origen una discusión en un restaurante del sur de la Ciudad de México, muy cerca de la casa donde vivía con él, en la colonia Jardínes del Pedregal.
Era la noche del 19 de diciembre de 2021, alrededor de las 22:15 horas:
“Estaba con mi esposo en el restaurante El Charco de las Ranas que se ubica en Periférico, colonia Jardines del Pedregal y mi esposo comenzó a agredirme de manera física y verbal, ya que me dijo que era una prostituta, una golfa, que yo lo quería matar y me pegó varias patadas cuando estabamos en el estacionamiento, por lo que subimos al coche y ahí me empezó a jalonear el cabello”, declaró la mujer, de acuerdo con la carpeta de investigación.
“Llegamos al domicilio conyugal aproximadamente a las 22:30 horas y subimos a la recámara donde yo tengo mi ropa. Yo pasé al baño y es como él se mete y me empieza a mojar la cara y después me empieza a escupir. Le pedí que se calmara, me salí de la recámara y en el pasillo me empujó y yo me caí, me levanté y a empujones me llevó hasta nuestra recámara y es como por atrás me jala del cabello”, siguió.
De aquel jalón, ella cayó al piso, entonces, continuó: “me lleva jalándome del cabello hasta el baño de nuestra recámara. Al estar junto a la taza del baño saca una pistola que siempre trae en su bolsa de mano, que él siempre carga, la cual empuña con su mano derecha y me pone el cañón de la pistola en la frente y me dice que me quiere matar”.
En la denuncia, Yrma Lydia contó que Jesús “N” trató de ahogarla en un jacuzzi y que la torturó con un dispositivo eléctrico que daba toques y le deseaba la muerte:
Mi esposo Jesús me vuelve a jalar del cabello por la parte de atrás y me lleva junto a la cama y toma de su buró la pistola de toques, la cual me pone en el estómago y la acciona y me empieza a dar de toques. Mientras me agredía, me decía, ojalá te mueras. Yo forcejeaba para que me soltara, me jalaba y lo aventaba con mis manos. Logro que me suelte y corro a la puerta de la recámara y le quito la varilla, abro la puerta y me salgo corriendo”.
Según el reporte, el agresor persiguió a la mujer en la calle, pero tropezó y por eso ella pudo escapar. Entonces le pidió a un chofer que la llevara al Fiscalía de la alcaldía Álvaro Obregón. Ahí, el Ministerio Público le tomó su declaración, giró oficios a diferentes áreas de la dependencia para apoyarla psicológica y jurídicamente.
Incluso, la autoridad solicitó medidas de protección y presencia policial por 60 días para salvaguardar su vida, pero no reclasificó el delito de violencia familiar a tentativa de feminicidio, pese a tal declaración.
El perdón y el carpetazo
El 21 de diciembre, dos días después de la agresión, Yrma Lydia y su abogada Alejandra Sánchez Castañeda acudieron de nuevo a la Fiscalía para desistirse de la denuncia contra Jesús “N”. Y aunque ella ratificó la declaración, justificó algunas acciones y otorgó el perdón a agresor:
“En este momento yo tenía coraje e impontencia manifesté que mi esposo me había puesto la pistola en la frente y que con ella me había golpeado, así como de la pistola de toques. Toda vez que sí, que mi esposo sí cuenta con armas de fuego, ya que es coleccionista, pero que nunca me golpeó o amenzó con alguna de ellas. Por lo que en este momento y de así convenir a mis intereses, es mi deseo otorgarle perdón a mi esposo, el señor Jesús, por el delito de violencia familiar conforme a lo establecido por el artículo 100 del Código penal”.
Según el reporte, tras ese desistimiento, la carpeta de investigación fue enviada al área de no ejercicio de acción penal. Por ello, ya no se pidió la revisión de cámaras del restaurante donde inició la violencia ni se citó a algún testigo del hecho, mucho menos al agresor.
El periodista dijo que solicitó la postura de la Fiscalía que dirige Ernestina Godoy y que ésta solo le respondió que “inició una investigación interna para esclarecer si hubo omisiones”.