Fin a la impunidad en ataques a la prensa

En la mira

Silverio Quevedo Elox

Veracruz.- Fue en el sexenio de Fidel Herrera Beltrán cuando se registró el primer asesinato de un periodista en Veracruz que marcó el inicio de una ola continua de más de dos decenas de crímenes cometidos en contra de los comunicadores en el estado.

Si bien ocurrieron otros atentados con anterioridad, el homicidio de Roberto Marcos García, cometido el 21 de noviembre de 2016, significó el inicio de una etapa negra para el periodismo, que no cesó en los gobiernos de Javier Duarte de Ochoa y Miguel Ángel Yunes Linares.

Marcos García, se desempeñaba como Jefe de información de la revista “Testimonio” y en dicha fecha fatídica, a casi dos años de iniciada la administración fidelista, fue arrollado por una camioneta en la carretera a Antón Lizardo y masacrado con 12 balazos.

Luego vinieron más. En muchos de los casos, tanto a finales del gobierno de Herrera Beltrán, como en el sexenio de Javier Duarte lo más cómodo para el sistema político en turno, para los funcionarios responsables de dar con la verdad, sea lo dolorosa, culposa o cruda que fuera, prefirieron mejor incriminar a las víctimas. Y tal parece que esta bondadosa salida para los políticos no se ha suprimido por una conveniente complicidad.

La incriminación ha venido a ser la hermana de la impunidad en los más de 20 homicidios contra periodistas en tierras veracruzanas en los últimos 13 años. Desde 2005 se contabilizan 24 crímenes y 8 desaparecidos, según el documento “Diagnóstico de la Libertad de Expresión de los Periodistas en Veracruz», dado a conocer por la Comisión Estatal de Protección a los Periodistas,  en junio de este año.

Si bien, algunos indicios relacionan más allá de la actividad periodística a comunicadores abatidos, en su mayoría ni pesquisas se han iniciado, menos se han castigados a los culpables. Se calcula que apenas el 5 por ciento de los casos han sido resueltos, ya sean agresiones, ataques directos, amenazas y homicidios, es decir, nada.

Este viernes 4 de enero se conmemora en México el Día del Periodista, y el gobernador Cuitláhuac García Jiménez  develará una placa con los nombres de los periodistas asesinados.

La titular de la Comisión Estatal de Atención y Protección a Periodistas (CEAPP), Ana Laura Pérez Mendoza, explicaría que se trata de hacer honor a los comunicadores caídos, mientras que el mandatario Cuitláhuac García anunciará una iniciativa para protección a comunicadores.

“El gobernador del estado de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez ha tenido la iniciativa que se devele una placa con los nombres de los periodistas caídos en el cumplimiento de su deber y esto es porque también va a anunciar una iniciativa que en su momento dará a conocer, porque es de su interés el tema de los periodistas y desaparecidos, el tema en general de los derechos humanos.”

Ojalá que como pasó en la mayor parte de los casos, cuando ocurría un sangriento hecho contra los profesionales de la prensa, se erradique la actitud incriminatoria y por tanto la impunidad que ha sido el sello de los gobiernos, al menos en los últimos tres sexenios de Fidel Herrera, Javier Duarte y Miguel Ángel Yunes.

Moisés Sánchez. Buena señal

Previo al evento de este viernes, el gobernador Cuitláhuac García se reunió la noche del miércoles 02 de enero con María Josefina Ordóñez y Jorge Sánchez Ordoñez, esposa e hijo del periodista Moisés Sánchez Cerezo, quien fue privado de su libertad el 02 de enero de 2015 y luego fue halado sin vida.

Al cumplirse cuatro años de los lamentables hechos, los responsables no han sido castigados, a pesar de que en su momento fueron identificados los autores materiales e intelectuales.

La muerte de Moisés Sánchez ha quedado impune, por lo que los familiares siguen clamando justicia, luego de que las autoridades correspondientes nunca actuaron para detener a los responsables.

“Lo que expresan Jorge su hijo y su esposa María Josefina, es que no se ha actuado, no se ha detenido, no ven ellos que haya un compromiso de la autoridad correspondiente para detenerlos, porque ya van varios años y no se han dado resultados”.

El mandatario invitó a que este viernes estén presentes los familiares de Moisés Sánchez Cerezo, así como de todos los periodistas que han sido asesinados a lo largo de las últimas tres administraciones.

Muy en corto

Siete de 212 con Winckler. Se sabe que de los 212 ayuntamientos que conforman el estado de Veracruz, sólo siete se han pronunciado a favor de que el fiscal Jorge Winkler Ortiz siga al frente del cargo y el resto han votado, a través de sus cabildos que se vaya de una vez por todas, ante los nulos resultados y la ineficiente labor que desempeño a lo largo de la administración de su jefe político Miguel Ángel Yunes Linares.

Con ello, Jorge Winkler tendría prácticamente los dos pies fuera de la Fiscalía, aunque está pendiente el curso legal que tendrá el amparo que promovió en contra de su remoción.

A pesar de que la mayoría de los ayuntamientos han fijado una postura de claro rechazo en contra del fiscal, son siete los que se aferran a mantenerlo en la Fiscalía, seguramente por órdenes del ex gobernador.

Entre los siete Ayuntamientos están el de Veracruz, por obvias razones, así como el de Álamo Temapache, Citaltépetl, Coxquihui, La Antigua, Martínez de la Torre, Yecuatla y Las Choapas; los primeros emanados del Partido Acción Nacional y el último del Partido del Trabajo.

Hay que recordar que el Congreso Local aprobó reformar el artículo 33 de la Constitución del Estado de Veracruz para que los diputados tengan la facultad de remover al fiscal.

Para que dicha reforma proceda, se requiere del voto de la mitad más uno de los 212 cabildos de la entidad y a excepción de los siete, por unanimidad alcaldes de todos los colores, incluidos los panistas quieren que se vaya.